¡Cuántas
veces te has felicitado a ti mismo por esa gran idea que has tenido! ¡Cuántas
veces has respirado aliviado al encontrar solución a un problema que te
preocupaba! Seguro que muchas… pero ¿te has acordado de dar las gracias por
ello?
La
inspiración, esa que nos trae las ideas geniales, la que nos da la solución a
un problema, la que nos hace ver eso que antes no veíamos… es el resultado de
la entonación espiritual con la mente común en donde entidades amigas, que
están en otro nivel de existencia, trabajan para nosotros como guías o
profesores.
Hay
muchos maestros de este tipo, unos especializados en las ramas del arte, otros
en aspectos técnicos, otros en el mundo de los conceptos e ideas, etc. Incluso
tú podrás llegar a formar parte de este cuerpo docente cuando hayas muerto y
recibas –si lo deseas, porque te gusta la enseñanza y el ayudar a otros- la
formación correspondiente.
Por
eso debes ser consciente de que esas ideas, esa inspiración, no ha sido tuya
sino que te la ha regalado tu maestro y por lo tanto hay que ser agradecido y dirigirle
un “gracias” con el pensamiento.
Desde
las cosas más sencillas, como por ejemplo encontrar sitio para aparcar cuando
la cosa estaba muy difícil y tú lo necesitabas; hasta las cosas más complejas,
como resolver un problema grave en tu vida personal o profesional… la idea que
te vino a la cabeza para salvar dicha situación no ha sido tuya sino de tu
maestro.
Lleva
esta reflexión en la cabeza un día, aunque sea sólo por probar. Procura ver
cuántos detalles de tu vida cotidiana (aunque sean pequeñas cosas sin
importancia) se ven solventados por un chispazo de inspiración. Y entonces, da
las gracias a tu maestro protector por haberte ayudado.
Nota
1.- Ese “maestro” es lo que los católicos llaman “ángel de la guarda”.
Nota 2.- No seas vago ni gorrón y no le dejes hacer a él todo el trabajo; haz siempre todo lo posible por resolver los asuntos tú mismo, que él ya intervendrá y te ayudará cuando lo crea necesario.
Una novela de amor, honor, amistad y deporte en la Grecia clásica…
“La Olimpiada”: https://amzn.to/3cDkAS7
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