El buen periodista es aquél que se debe al lector, que pone el interés del lector por encima de cualquier otra consideración, que le transmite la información de manera imparcial para que sea cada lector quien se forme su propia opinión.
El periodista esclavo es aquél que sigue los dictados de su editor –esté o no de acuerdo con sus planteamientos- y utiliza las noticias con un enfoque partidista, para impartir doctrina, para influenciar a favor o en contra de unas determinadas ideas, tratando de conseguir que el lector asuma las ideas que le transmite.
El periodista esclavo es aquél que sigue los dictados de su editor –esté o no de acuerdo con sus planteamientos- y utiliza las noticias con un enfoque partidista, para impartir doctrina, para influenciar a favor o en contra de unas determinadas ideas, tratando de conseguir que el lector asuma las ideas que le transmite.
1 comentario:
De Jefe de Sección para abajo, ¿conoce usted algún periodista que no sea esclavo?
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