Los
Círculos de Hadas: Ciencia y Leyendas detrás de un fenómeno natural
En los bosques, praderas y claros de
muchas regiones del mundo, es posible encontrar un fenómeno curioso y
fascinante: una hilera de setas dispuestas en un círculo casi perfecto.
Conocidos como círculos de hadas, estos anillos han capturado la imaginación humana
durante siglos, inspirando mitos y leyendas, pero también tienen una
explicación científica sólida.
Los círculos de hadas, también llamados
anillos de hongos o círculos de setas, son el resultado del crecimiento de
ciertos tipos de hongos, específicamente los que forman micelios subterráneos.
El micelio es una red de filamentos (hifas) que constituye el cuerpo principal
del hongo y se extiende bajo la superficie del suelo. Los círculos de hadas se
forman debido a la manera en que el micelio crece y se reproduce.
Todo comienza con una sola espora que
germina en el suelo. A partir de ahí, el micelio crece hacia afuera en todas
direcciones, formando un círculo subterráneo. Este crecimiento radial ocurre
porque el micelio busca nutrientes de manera uniforme en su entorno,
extendiéndose como los radios de una rueda. Con el tiempo, el centro del
círculo puede agotar los nutrientes del suelo, mientras que el borde exterior,
donde el micelio sigue activo, continúa prosperando.
Las setas, que son los cuerpos
fructíferos del hongo, emergen en la superficie del suelo en la periferia del
micelio, donde las condiciones son óptimas. Esto crea un anillo visible de
setas que refleja la forma circular del micelio subterráneo. Las setas producen
esporas que se dispersan, pero el círculo mismo persiste y puede expandirse año
tras año, a veces durante décadas o incluso siglos, dependiendo de la especie y
las condiciones del entorno.
Los círculos de hadas a menudo tienen un
impacto visible en la vegetación. En algunos casos, el césped dentro del anillo
puede volverse más verde debido a los nutrientes liberados por el micelio al
descomponer materia orgánica. En otros, el centro puede parecer más seco o
muerto, ya que el micelio agota los recursos. Este contraste puede hacer que
los círculos sean aún más llamativos.
Pero no todos los hongos forman círculos
de hadas. Entre las especies más comunes están Marasmius oreades (conocida como
la seta de los círculos de hadas), Clitocybe nebularis y algunas especies de
Agaricus. Estas setas suelen aparecer en praderas o bosques templados,
especialmente en suelos ricos en materia orgánica.
La formación de círculos de hadas
depende de condiciones específicas. Necesitan suelos húmedos, ricos en
nutrientes y sin perturbaciones significativas, como arado o construcción. Por
esta razón, son más comunes en praderas antiguas, bosques naturales o jardines
poco intervenidos. Los círculos pueden variar en tamaño, desde unos pocos
centímetros hasta decenas de metros de diámetro, y algunos han sido
documentados con cientos de años de antigüedad.
Vicente Fisac es periodista y escritor. Todos sus libros están disponibles en Amazon:
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