El diario Aftenposten se ha
hecho eco de un curioso experimento llevado a cabo simultáneamente en muchos
países: En cada país se “perdieron” a propósito 10 carteras, conteniendo cada
una el equivalente a 50 euros (en moneda local) así como la dirección y el
teléfono del propietario. ¿Cuántas fueron devueltas? En Méjico 2, en Estados
Unidos 7, en Noruega y Dinamarca 10.
Este sencillo experimento se une a los numerosos
estudios que analizan el grado de confianza y honestidad que ofrecen los
ciudadanos de los distintos países. Como explica Alexander W. Cappelen,
profesor de la Escuela Noruega de Economía, los noruegos son los líderes
mundiales en la confianza. Las cifras también muestran que el nivel de confianza es más
alto en los países ricos, así por ejemplo, en Trinidad y Tobago sólo un 4 por
ciento afirma que puede confiar en otras personas.
Según Cappelen, la riqueza
de Noruega ha ayudado a crear un alto grado de confianza y “ese alto nivel de
confianza en sí mismos, nos hace más ricos y hace aumentar el crecimiento
económico. Cuando confiamos en
los demás, podemos trabajar juntos de una manera más eficiente. Necesitamos menos abogados y un menor
número de contratos formales”. Algunas investigaciones en este sentido muestran
que Rusia podría ser un 70 por ciento más rica si hubieran tenido el mismo
nivel de confianza que Suecia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario