El refranero español es muy sabio. Uno de los refranes
más populares dice: “Mal de muchos, consuelo de tontos”. Creo que no hace falta
explicar su significado. Pero al ser tan popular este refrán y ver cómo está el
mundo, se ha hecho igualmente popular una versión ligeramente diferente del mismo, esa que
dice: “Mal de muchos, consuelo de todos”.
La conclusión, lamentablemente, tiene visos de ser
cierta: “Mal de muchos, consuelo de todos nosotros que somos bastante tontos”.
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