domingo, 3 de noviembre de 2013

Estoy esperando

ESCRITOR.- Sí, tienes razón, hay muchas mujeres en el mundo; pero es que yo no busco a una mujer, busco a un alma de mujer.
RAFAEL.- Lo siento, puede que no haya sido buena idea meterte en este ambiente.
ESCRITOR.- Pero ya estoy dentro.
RAFAEL.- (Tratando de infundir optimismo). ¡Y puedes salir cuando quieras!
ESCRITOR.- ¿Sin ella?
RAFAEL.- Pues claro, seguro que hay más almas como dices, en tu mundo, allá fuera.
ESCRITOR.- En mi mundo dices... pero ¿cuál es el mío?
RAFAEL.- El tuyo es el normal, el de la vida del noventa por ciento de las personas. Y la verdad es que te envidio. Tú puedes hacer lo que quieras y en cambio yo, sólo tengo un tema.
ESCRITOR.- Y si eres capaz de reconocerlo ¿por qué no tratas de cambiarlo?
RAFAEL.- Ya es tarde. Este es mi mundo y fuera de él no soy nadie, ni tengo amigos ni vida social ni nada. Me guste o no, este ambiente es el único que me da seguridad aunque tenga que ir con la careta puesta.
ESCRITOR.- ¿No te atreves a romper, a quitarte la careta?
RAFAEL.- Ya lo intenté y no supe encontrarme fuera de este ambiente. Además, no te preocupes por mí; cuando finjo, me identifico con el personaje que represento y me olvido de quién soy. Tan sólo soy capaz de verme como soy en realidad alguna vez que me quedo solo o cuando estoy contigo; tienes una forma de hablar que es igual que si hablara conmigo mismo. (Se queda pensativo por un instante). Bueno, pero volviendo a donde estábamos: ¿qué estás haciendo aquí?
ESCRITOR.- Estoy esperando.

De la obra de teatro "Sigue esperando", de Vicente Fisac, incluida en el libro “El tercer yo”.

1 comentario:

Rapunzel dijo...

Me encanta...