lunes, 17 de septiembre de 2012

Aguirre, la última Esperanza



Se podía estar o no de acuerdo con ella, pero al menos siempre ha ido de cara y ha sido coherente con sus ideas. Pero no es por ahí por donde quiero enfocar este comentario. Simplemente me quiero centrar en que nunca es tarde para aprender la lección más importante: en esta vida todo es cuestión de prioridades y la primera elección debe ser siempre la familia, tus seres queridos… por encima de cualquier ambición o compromiso.

Nunca es tarde para mandar a un rincón a la política, al poder, a la espiral de ambición que te ciega y no te deja ver lo que de verdad es importante en esta vida: estar con los tuyos y VIVIR.

Esperanza Aguirre –aunque haya sido empujada a tomar esta decisión por cuestiones de salud o de su esfera personal íntima- ha tomado la mejor decisión. Ojalá tomasen la misma decisión el medio millón de políticos que todavía hay en España.


PD 1.- Es posible que este comentario sea completamente erróneo. Según noticias que circulan por la Red, el verdadero motivo de su dimisión es el enfrentamiento que tuvo con Rajoy, en el despacho de este último, el pasado 4 de septiembre; un enfrentamiento cuyas voces destempladas traspasaron las paredes del despacho. El motivo: Rajoy le recriminó que se hubiese comprometido –y sin consultarlo con nadie del Comité Central del PP ni del Gobierno central- a cambiar leyes para que se instalase en Madrid Eurovegas, dándose además la circunstancia de que ella no tiene potestad para cambiar esas leyes y además el partido en el Gobierno no quiere cambiarlas. En el transcurso de esa bronca Rajoy le pidió que dimitiese. Ella se lo pensó y así lo hizo pero… sólo ha dimitido como presidente de la Comunidad no como presidente del PP madrileño, lo cual quiere decir que va a seguir metida en la política, trabajando a tope en esos menesteres, y dejando como siempre a su familia en segundo plano, salvo para concederles lgún favor que otro (puesto de asesor a su hijo pequeño, contratos de la futura Eurovegas a la empresa de su marido, etc.

Si todo esto último es verdad, el tiempo lo dirá y demostrará lo erróneo de mi primera apreciación.

PD 2.- Pasado el tiempo, ella ha seguido con su actividad política, medrando como hacen todos los políticos... lo que demuestra que yo estaba equivocado en mi bien intencionado comentario. Para ella la política sigue siendo más importante que su familia y que su propia salud. Igual que todos los políticos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Deberías tener una columna de opinión en algún periódico... ¿Por qué no lo intentas?

Palabras inefables dijo...

Gracias por tu comentario. Ya la tuve cuando estaba en activo profesionalmente; ahora "mi columna" es esta. El mundo digital tiene cada vez más fuerza.