Los noruegos son buena gente, de eso no cabe la menor duda, pero también son muy inocente. Ahí tenemos el caso de Bjorn Heidenstrom, quien hace unos días llegó a Alicante... en bicicleta! Sí, en bicicleta desde su país; pero no es esto lo más sorprendente, sino el hecho de que Alicante sólo es una temprana escala en su viaje, ya que pretende llegar hasta Sudáfrica para el Mundial de Fútbol. Bjorn hace esto para recoger camisetas de grupos deportivos y usarlas para hacer con ellas una enorme camiseta en pro de la paz.
Loable propósito, pero lo que me preocupa es su candidez. ¿Conseguirá llegar vivo a Sudáfrica? Una vez que deje España y Portugal tendrá que pasar al continente Africano y allí conducirse por caminos de tierra en una tierra donde la seguridad ciudadana es algo tan desconocido como la humildad y austeridad en los políticos.
Ojalá salga bien de esta, pero va a necesitar mucha suerte y ayuda divina para poder contarlo.
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