(Oda a la final de Copa del Rey disputada en Valencia en
16 de abril de 2014)
Con mil millones gastados
en reforzar sus plantillas,
Barsa y Madrid disputaron
la final que perseguían.
Ya se vio desde el principio
que el Barsa no tenía pinta
de ganar este partido...
con Pinto en la portería.
El Madrid se entusiasmó
y el Barsa se paseaba,
Di María hizo un gol
y a Messi no lo encontraban.
Tuvo que ser un chaval,
jovencito e inexperto,
el que dijo “¡Bartra, ya!”
y la metió para adentro.
“¿Dónde está Messi?”, decían
los culés desde las gradas,
y el astro no aparecía,
y a Neymar lo derribaban.
Después de muchos intentos,
acertó Bale a meterla
ya hacia el final del encuentro,
y la grada fue una fiesta.
Pudo Neymar empatar,
mas se encontró con un palo,
y es que el portero rival
tiene madera de santo.
El Madrid se desquitó
y alzó por fin una Copa...
que la anterior la bebió
el Atleti en plena gloria.
Y ahora queda la Liga,
que después de tantos años
tuya mía tuya mía,
va a cambiar por fin de manos.
Con esfuerzo y con sudor,
con humildad y buen juego,
el Atleti... campeón,
la Liga ya... no es un sueño.
PD.- Da igual
quien gane la Liga, porque el Atleti ya ha ganado –otra vez- su sitio entre los
grandes.
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