La
primera diferencia es que el sueño siempre está ligado al acto de dormir,
mientras que la visión espiritual se puede producir en ese estado intermedio
que se da entre el sueño y la vigilia e incluso también durante la meditación.
La
visión espiritual se recuerda con mucha facilidad porque sucede en esa fase intermedia entre sueño y despertar, la zona que delimita
la consciencia subconsciente de la consciencia subjetiva, y por eso deja
huellas en la memoria mientras que el sueño es más difícil recordarlo.
Cuando
nos despertamos, recordamos vivamente lo que hemos soñado en esa última fase,
casi al momento de despertar, y en cambio nos resulta más difícil recordar lo
que hemos soñado a lo largo de la noche en otras fases más profundas del
dormir.
¿Por
qué se produce esa visión espiritual? Porque en esos momentos limítrofes con el
despertar o promovidos por la meditación, se dan las condiciones ideales para
que se establezca una conexión entre la Consciencia Universal (que es la que
nos facilita esa visión o información) y nuestra consciencia subjetiva que la recibe.
Vicente Fisac es periodista y escritor. Todos sus libros están disponibles en Amazon: https://www.amazon.com/author/fisac
“No son coincidencias”: https://www.amazon.es/dp/B083XVGBHZ
Vicente Fisac es periodista y escritor. Todos sus libros están disponibles en Amazon: https://www.amazon.com/author/fisac
“No son coincidencias”: https://www.amazon.es/dp/B083XVGBHZ


No hay comentarios:
Publicar un comentario